Las noticias de los últimos días me hacen pensar que hemos entrado en un bucle del que nunca saldremos. Parece imposible salir de una visión cíclica del tiempo... El PSOE da un giro al centro de cara a las elecciones; según se dice las políticas van a ser las mismas, pero con la bandera de España siempre presente. Soy bastante pragmático, y por ello, a priori, no me molesta que un partido use la imagen que quiera mientras sus actuaciónes sean buenas (o las que a mi me parecen buenas). Pero no es del todo cierto: hace 3 años, el Ejecutivo le hubiera dicho a Ibarretxe "ya veremos", y no "ni de coña".
A la derechona ya se le han acabado las oportunidades de cambiar. Como siempre, su inmovilismo total, no les permite apreciar las evidencias: van a perder las elecciones por culpa de Rajoy (o lo que es peor... seguramente las ganarían si pusieran a Gallardón al frente). ¿A caso existe diferencia alguna entre ambos líderes para que la "opinión pública" los observe de forma tan diferente?¿Por qué valoramos tanto el aspecto de las cosas?
El tercer ejemplo de cómo la pre-campaña convierte esta época en un dejá-vù, se llama Unión, Progreso y Democracia, o Libertad Unida y Progreso, o algo parecido. Me alegra bastante la aparición de este partido por dos razones: va a quitarle unos poquítísimos votos a ZP y unos cuantos más al PP, lo que le alejará aún más de gobernar. Pero es tremendamente violento ver que ya llega a España la moda europea de los partidos "blancos" (o amarillos, o marrones...).
Existieron una vez unos señores que hicieron algo parecido: proviniendo de la izquierda, inlcuso habiéndose formado intelectualmente desde la izquierda, habían renegado de sus partidos por unas posturas "poco valientes" de éstos. Ellos prefirieron tomar un camino nacionalista. Formaron organizaciónes de presión, y partidos apoyados económicamente por los sectores sociales que históricamente apoyaban a otros partidos conservadores y liberales. Su discurso revanchista y ultra-nacionalista ganó adeptos rápidamente... ¿os suena? Se llama Fascismo, o Nacional-Socialismo, según el lugar. Ahora, en lugar de tener denominaciónes de corte "Social-nacional", estos partidos nuevos se dotan de una imagen de centro y un discurso de progreso: Tienen el resentimiento, las ideas progresistas deformadas, el ultra-nacionalismo y el apoyo de Jiménez Losantos, que ya propuso este partido para las locales y autonómicas. ¿Cuál es la diferencia con el Partido Nacional Fascista? aún no tienen fuerzas de asalto, fasci espagnoli di combatimento, ni nada parecido. Tiempo al tiempo, que se llevan muy bien con AVT-Ynestrillas.
Lo de siempre, una y otra vez.
jueves, 4 de octubre de 2007
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